Parece mentira, esperábamos tanto este momento, planeamos miles de cosas que hacer, contábamos hasta los días; para que al final, no llegase a pasar absolutamente nada.
Me ha costado pasar cada segundo, no parecía que fuese esa fecha tan esperada, faltaba algo, faltabas tú. He cogido odio a cada salido que me decía algo, sabía que tú les callarías la boca. Me han faltado abrazos, miradas, besos, caricias, apoyo, sitios que enseñar. Ha sido raro, desde un principio estaba feliz, positiva,creía que iba a ser fuerte, y después de casi 4 semanas, pensaba que lo tenía ya superado, pero no, a medida que iban pasando los días, que escuchaba y veía todos los cambios a mi alrededor, me iba hundiendo poco a poco, te buscaba desesperadamente, porque sigo siendo esa gilipollas que espera que aparezcas por detrás me tapes los ojos y digas: todo esto ha sido una broma. Pero no, después de falsas confusiones, de alguna que otra miradita y flashbacks, sigo estando igual de perdida, igual de hundida, pero seca, no soy capaz de soltar ni una sola lágrima, siento que me he apagado.
Y desde entonces odio los domingos, odio todos los putos números 21, y odio todos los primeros de mes. Son superior a mi. Porque ahora soy débil y el mundo puede conmigo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario